jueves, 11 de febrero de 2010

No sabía qué poner

pero quería poner algo.

1 comentario:

  1. Y qué tal un "fluir de conciencia" de cinco lineas sin objetivo alguno?
    A veces son maravillosos.
    Te sientas y anotas lo que te viene a la mente.
    Sin juicio.
    Haces quince lineas.
    Y eliges cinco.

    Te vas a asorprender.
    Jamás tendrás la amente en blanco,
    menos aún la página,
    escuchando el fluir de conciencia.

    Porque lo que blanquea es...

    EL JUICIO.

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